Los integrantes del proyecto se aventuran al lanzamiento de la 2º temporada, que promete continuar con su importante contribución documental y expositiva de la música local

«Es un museo musical». Así lo definía Pedro Silva, uno de los fundadores, cuando le preguntábamos que era realmente Sesiones En Vilo, y no le falta razón. Este proyecto, además de simbolizar un homenaje funcional al trabajo etnomusicológico del célebre Alan Lomax, es la evidencia patente de que la escena musical en A Coruña está más viva que nunca, y representa una plataforma accesible para los artistas emergentes que no cuentan con los medios suficientes para grabar su música en condiciones. En una sociedad absorbida por las tendencias y la transitoriedad, la aparición de propuestas que documenten el presente se postulan como vitales para que la esencia de toda una generación no quede relegado a la vorágine de lo efímero. Sesiones En Vilo encarna esta premisa fundamental, y después de un parón merecido de su primera temporada, cargada de diversidad musical, el proyecto estrena su 2ª temporada el próximo 11 de octubre con las mismas ganas de siempre y, sobre todo, con el mismo objetivo con el que comenzaron: impulsar e inmortalizar el underground de la música coruñesa.