La carrera del músico madrileño lo confirma como uno de los compositores nacionales más importantes de los últimos 40 años, y su legado no para de crecer.
Lugarteniente del legendario Joaquín Sabina, hasta su sonada ruptura en 2020, y productor de inmensidad de reconocidos artistas nacionales, la trayectoria de Pancho Varona está plagada de éxito en la sombra. Y es que ser el artífice de hits tan importantes como los Sin Embargo o Contigo de su antiguo compañero, o el No Me Importa Nada que catapultó aún más a una jovencísima Luz Casal- ahora icono atemporal del pop español- allá por el 1989, no es para cualquiera.
Madrileño de cuna, Varona representa un pilar indispensable de varias generaciones de música en español. Su talento innato para arreglar y componer, en ocasiones pasa desapercibido ante el ruido mediático, bien porque su polémica separación de Joaquín Sabina, bien porque se ha mantenido la mayor parte de su carrera en la retaguardia, como mente creativa en el éxito de artistas tan reconocidos como Ana Belén, Serrat, Miguel Ríos, o el propio Sabina. Porque Varona no solo fue un secundario de lujo, sino que perpetuó su legado como uno de los compositores nacionales fundamentales del último medio siglo.
La magia de Pancho Varona no para. Tocará en La Coruña el próximo 3 de mayo, en el Playa Club, para presentar su nuevo álbum «Punto y seguido», un disco que confirma la evidente eternidad de la leyenda del compositor madrileño.