La contienda de los géneros musicales por conquistar las listas que presiden el mainstream parece debilitar la eternidad del rock, ¿o no?
Escrito por Juan Granados
Actualmente, la batalla por el público masivo está claramente dominada por el género urbano- reggaeton, trap, entre otros-. Pero, ¿esto fue siempre así? La realidad es que no. El género urbano surge a finales de los 90, pero emerge en la escena musical a principios de los 2000´s.
Hasta esta época, el género preponderante fue el rock, con grupos como The Beatles, Los Rolling Stones o The Doors. El Rock, junto a otros estilos como el heavy metal y sus derivados, marcaron a varias generaciones que vivían por y para la música. Sin embargo, su popularidad actual se sustenta en la nostalgia de unos pocos románticos del pasado.
Cantantes como Daddy Yanke o Don Omar son los exponentes precursores del movimiento urbano, un fenómeno viral que cimenta los principios del mainstream contemporáneo. El éxito de la música urbana no se podría explicar sin sus dos pilares fundamentales: su ritmo pegadizo de compás 4/4 y el autotune, un procesador de audio que enmascara los errores de la voz de los cantantes, que permite conseguir una afinación mucho más precisa. ¿Será esto lo que hace que hace que el reggaetón sea una música adictiva y atractiva para los jóvenes?
El caso es que, poco a poco, el rock va perdiendo peso en la industria. Esta caída se ve claramente reflejado en que apenas irrumpen nuevos grupos, al contrario de lo que ocurre con en género urbano, del que salen artistas emergentes cada año, como el caso de Saiko.
Cuando hablamos de Rock, nos vienen a la cabeza las “vacas sagradas” del género, como pueden ser Metallica o Led Zeppelin, una reminiscencia negativa para su futuro, pues llegara un momento en el que estos grupos ya no estarán y es muy probable que el rock pase a un segundo plano.
La música, al igual que todo en esta vida, va por modas. Hace 60 años eran The Beatles globalizando los primeros pasos del pop, y ahora son artistas como Duki o Quevedo los que llenan estadios. Ante semejante panorama, no sabemos si volverá a predominar el rock en la industria, o simplemente cómo evolucionará la música en general.